**¿QUEDA ALGO POR SALVAR EN ESPAÑA? LA REALIDAD GOLPEA A LOS JÓVENES**
La situación en España es alarmante: más del 25% de los jóvenes menores de 24 años están dispuestos a votar por la ultraderecha, un fenómeno que pone en jaque el futuro del país. En un contexto donde más de 500,000 jóvenes cualificados han abandonado la nación en el último año, la pregunta resuena con fuerza: ¿queda algo por salvar en España?
La crisis económica y social se agrava. Con una tasa de desempleo juvenil que roza el 27%, muchos jóvenes se ven atrapados en un ciclo de precariedad y desilusión. La falta de oportunidades laborales, combinada con sueldos miserables y alquileres exorbitantes, ha llevado a que el 70% de los jóvenes no puedan emanciparse antes de los 30 años. La sensación de inseguridad se intensifica en las calles, donde la delincuencia parece descontrolada, dejando a muchos sintiéndose vulnerables y sin futuro.
El gobierno, lejos de enfrentar estos problemas, parece más interesado en dividir a la población con políticas que abren viejas heridas. La falta de seguridad jurídica en el mercado de alquileres y la presión fiscal asfixiante están llevando a la clase media al borde de la extinción. ¿Cómo se puede construir un futuro próspero cuando los jóvenes se sienten obligados a dejar su hogar?
La desesperanza se apodera de un país que, a pesar de sus problemas, aún tiene potencial. La voz de la juventud está en juego y el tiempo se agota. Si no se toman decisiones urgentes, España podría perder a su próxima generación. La pregunta es: ¿qué podemos hacer para evitarlo? La respuesta está en la acción colectiva. La lucha por un futuro mejor no ha terminado; queda mucho por salvar en España, pero el momento de actuar es ahora.