¡URGENTE! Miguel Uribe, el precandidato presidencial colombiano, ha despertado de un coma inducido tras una semana de incertidumbre, y su primera declaración ha encendido alarmas en el país. A las 6:43 de la mañana, en la clínica Fundación Santa Fe de Bogotá, el joven senador abrió los ojos, sorprendiendo a su equipo médico y a su familia, quienes llevaban días en vela. El doctor Álvaro Jaramillo, jefe de neurología, no pudo contener las lágrimas al ver a Miguel consciente, pero lo que siguió dejó a todos en estado de shock.
Mientras intentaba comunicarse, Miguel murmuró que “alguien cercano me miró antes de disparar”. Esta revelación ha desatado una tormenta política, obligando al presidente Gustavo Petro a suspender reuniones y a pedir informes inmediatos sobre la salud del senador. Las redes sociales estallaron con hashtags como #UribeDespierta y #MilagroEnBogotá, pero la verdadera preocupación radica en lo que Miguel podría recordar sobre el atentado que casi le cuesta la vida.
La situación se intensificó cuando, tras un análisis médico, se decidió que Miguel no estaba en condiciones de hablar con la fiscalía. Sin embargo, sus murmullos sobre “traición” han hecho que la tensión aumente en los círculos políticos. La fiscalía ya ha comenzado a investigar la posibilidad de una conspiración interna, y se han revisado las grabaciones del evento donde ocurrió el ataque.
Mientras tanto, la familia de Miguel ha optado por el silencio, enfocándose en su recuperación, pero la presión pública es inmensa. Miles de ciudadanos exigen justicia, y los rumores sobre la identidad de sus atacantes se propagan rápidamente. Las medidas de seguridad en el hospital se han incrementado, y se teme que otros puedan intentar silenciarlo nuevamente.
Colombia está en vilo, y la verdad detrás del atentado de Miguel Uribe podría cambiar el rumbo del país. Las autoridades están en alerta máxima, y el tiempo corre. ¿Qué más revelará Miguel al recobrar su voz? La nación entera espera ansiosa respuestas.