La Reina Sofía ha abandonado el Palacio Real en medio de un tumulto familiar, tras un enfrentamiento con doña Letizia que ha dejado a la monarquía española en una crisis sin precedentes. La situación se desató cuando la reina consorte decidió excluir a Victoria Federica de las celebraciones por la graduación de la infanta Sofía, provocando la indignación de la reina madre, quien considera que esta acción siembra discordia entre dos jóvenes que se han criado como hermanas.
La decisión de doña Letizia, calificada por muchos como un error monumental, ha generado un gran revuelo. La reina Sofía, conocida por su popularidad y credibilidad en el ámbito real, no pudo contener su frustración y decidió alejarse de la tensión en Zarzuela. Se ha informado que se trasladó al paraíso de Santo de Guarense en busca de paz, antes de continuar su viaje en un catamarán hacia la Ribera Sacra, buscando escapar del bullicio madrileño.
Fuentes cercanas a la familia real revelan que la reina madre ha expresado su desacuerdo con la actitud de doña Letizia, quien parece ignorar la importancia de mantener la unidad familiar. En este contexto, el rey Felipe VI se encuentra en una encrucijada, pues ahora tiene la responsabilidad de restaurar el orden y la armonía en la familia real. ¿Tomará el rey medidas para corregir la situación y asegurar que todos los miembros de la familia Borbón sean tratados con igualdad?
La presión aumenta y la opinión pública está al tanto de cada movimiento. La monarquía española, en un momento crítico, se enfrenta a un dilema que podría definir su futuro. La pregunta que todos se hacen es: ¿podrá el rey Felipe VI mediar en esta crisis familiar y evitar un cisma aún mayor? La situación es tensa, y el desenlace es incierto. Estaremos atentos a los próximos acontecimientos.